sábado, 18 de septiembre de 2010

EXITO O FRACASO


 ¿A quién no le gustaría ser un triunfador? Todos deseamos el triunfo. Pero, ¿qué hacemos realmente para ser triunfadores?

Todo lo que se quiera lograr de la mejor manera y, con los menores inconvenientes posibles (objetivos), debe ser planeado. Vivimos el día a día a la espera de que ‘las oportunidades lleguen solas’. Hay quienes dicen y, de ello están convencidos, de que las oportunidades se da a diario. No nos opongamos a ese pensar y, más bien reforcemos la teoría añadiendo, el que debemos estar preparados para detectarlas y saberlas aprovechar.

RECURSO HUMANO: LA VERDADERA RIQUEZA




‘...las empresas funcionan básicamente con el aporte que entregan los hombres y las mujeres que la conforman. Las máquinas solas, con su propia energía, no podrían producir plenamente los resultados esperados por el cliente’ (1)

Cuando leemos sobre los objetivos de toda empresa, sean estas comerciales, industriales o de servicios, amen de lo relacionado con la supervivencia, el crecimiento y el servicio a la comunidad desde el punto de vista social, no deja de sobresalir en ellos, el factor económico: toda empresa para lograr todo lo anterior necesita obtener utilidades, es decir ganancias. Hasta ahí, todo, no es más que una filosofía. El meollo empieza cuando surge la pregunta: ¿cómo lograrlo?.